Una explicación parcial o sólo parcial o sólo explicación o algo

Parece que ha oscurecido

desde que oí cerrarse la puerta

tengo meses sin salir

afuera pasan cosas de verdad.

Comienza a darme miedo visitar los bares

comienza a darme miedo las personas

porque en las calles la gente sangra

la gente escupe a tus espaldas.

En esta mesa que escogí para escribir

un vaso de agua fría me acompaña

mi desayuno  

y una canción que dice: este nunca no esconde un ojalá.

Tengo meses aguardando detrás de la puerta

sólo algo importante llevará mi mano a la cerradura

algo que tenga que ver con comida.

Cómo quisiera que ninguno de estos versos fueran para ti.

Yo no soy Simic     y tú eres una explicación parcial.

¿Cómo desarmar el silencio?

Tu movimiento armónico es vaivén

mientras un cuerpo no te habite

permaneces indefinidamente en excitación

hasta que algo atore tu vacío.

¿cómo desarmar el silencio?

La próxima vez no te encojas de hombros

no te avergüences de tu necesidad

métete dentro de tu piel los deseos

métete el dedo    métete el mundo

los sentirás apretarse contra los tuyos.

El próximo hombre que te busque el corazón

tendrá que arrastrarse hasta los cielos vacíos

para escuchar sus latidos.

Yo no soy Simic   y tú siempre serás un simulacro.

En Tijuana también hay Motel Paraíso

También tuve mi Motel Paraíso

pero jamás prendí la televisión para ver noticias

no quiero observar al presidente en la pantalla

jamás miré mi rostro en el espejo    

siempre lo usé para ver su tatuaje en dorso

parecía una estampilla ya usada.

Aquí   nosotros éramos los que se comían a besos

y nos arrancábamos la ropa

nos comíamos a mentiras.

La habitación tenía un diván tantra    rojo

como sus labios la primera vez que la conocí.

Nunca le dije que me gustaba un poema que llevaba el nombre del Motel.

En su cabello    mi boca pronunciaba versos

que eran barcos sobre el mar en su cabeza.

Yo no soy Simic   y tú no volverás a rasgar las sabanas en las nubes.

Mi venganza será no vengarme

porque soy un huracán que arrasa con nada

porque todo lo veo desde una esfera protectora

porque lo nuestro no alcanzó a escribirse

y porque tal vez estás líneas sean para ti

o tal vez no:

Mira que tengo casi dos horas tratando de escribir un ultimátum

y no se me ocurre gran cosa

mira que quiero todo rápido

o tal vez sea miedo

mira que en ocasiones no entiendo los códigos del enamoramiento

y yo me ofrezco como piedra en cauce.

Mira que en vez de ir a romperte el hocico me tienes aquí escribiendo

un harto de pendejadas

mira que en los periódicos aparecen cuerpos sin cabeza

mujeres maltratadas     nombres de niños que tienen días desaparecidos

y yo aquí escribiendo un montón de palabras que intimidan a nadie.

Mira que en vez de ir a quemar tu casa    

te pienso como una gran duna que se desmorona con los días.

Lee estos versos porque nadie se volverá a tomar la molestia de escribirte

lee este manojo de líneas      

lee este poema como un gran adorno floral

porque es el último.

Carta.

Escribo desde un comedor que jamás es habitado por completo, escribo porque no sé hacer otra cosa. Hoy no te diré que me gustas (ya lo dije), hoy te digo que protegerte de la lluvia fue un placer, que tú no te das cuenta pero tus dientes frontales mal posicionados me parecen perfectos, que todos los meses que no te procuré fue por miedo, hoy quiero que sepas que no dormí por pensar en ti.

Hace una semana fue mi cumpleaños y no comí pastel hasta después de siete días,  la mordida que le di a tu rebanada de pay me hizo recordar el accidente en el que casi muero, en el que después de estar inconsciente por algunos segundos lo primero que hice al abrir los ojos fue sonreír, así fue escucharte.

Siempre sé que traerás el vestido más bonito de la fiesta, que todos te queremos por ser tan humana, que yo no sé de fonética pero el sonido de tu voz es el más hermoso.

También sé que tal vez nunca te tenga.

Hoy el día será largo, en el noticiario dicen que lloverá hasta el anochecer, que los automovilistas tomen sus precauciones, que hay embotellamiento en “x” calle.

Y ya sabemos lo que se avecina para mí, trabajar, emborracharme y pensar en lo bella que te vez con lentes.

Escribo desde un comedor que jamás es habitado por completo, ni si quiera por mí.

Un martillo golpea su cabeza

el aura anuncia que pronto habrá explosión

palidece y cae en un campo que no es de batalla.

Té de lavanda ayuda a dormir.

Chocolate y nitratos son enemigos

y lloro junto a mi hermano cada vez que me dice que tiene migraña

que el sol es ese foco que lo persigue por casa

que no aguanta la jaqueca

que está harto de meterse pastillas

y si dios existiera yo le pediría que los dolores me los pasara a mí

que todo lo malo habitara en mí

que le cambio el desamor por la puta de la migraña

que lo justo en estos tiempos ya no es justo

y por eso nosotros no salimos de casa.

Si dios existiera estas líneas no existirían

el dolor no existiría

la mentira no existiría

y yo me callaría para siempre.

Estoy tan enojado que le daré like a todas las publicaciones

hasta la foto de tus nalgas   esas que ya fueron de todos.

Estoy encabronado porque no valoras mis estados dedicados

porque no entiendes que desde hoy en todas las líneas que escriba estás

estoy molesto porque yo no quiero migajas   siempre el pastel entero es para mí.

Ya no te escribiré cartas

ya no revisaré tu muro

me vale verga que estés conectada.

No   no es poesía     es mi boca que se chinga por pronunciarte a cada minuto

es mi cuerpo que te extraña    es mi verga que borbotea al pensarte.

Y me dices que espere     que el amor va con calma

y yo lo que más he tenido en la vida es calma

calma para decirte que chingues a tu madre

que dejes de malabarearme

que termines de una vez con este circo

que dejes de decirme poeta

que yo no escribo para liberarme si no para no romper madres

que yo no soy el patán que creías

que la alt lit me vale verga

que no duermo por pensar en ti

que no duermo porque tu voz ronda mi cabeza

porque me llegan whatsapp’s

porque cada vez que termino de leer tus mensajes pendejos le grito a la computadora

porque la única mentira que te he dicho es que me importas más que la poesía

y ni abriendo mi pecho entiendes.