Éramos como esas series gringas    

donde los vecinos crecen juntos durante más de quince años

se hacen novios y juran formar una familia.

Fuimos eso      la línea perfecta que jamás escribí

el episodio más efímero de la televisión.

Concurso para el premio a la mejor tortura

un teléfono timbrando

una carta sin destinatario sin remitente      se queda       en el aire

colchas nuevas      sin residuos      de semen

mujer que grita: no lo vuelvas a hacer

piano sin que nadie lo toque

amarres al cuello y piernas

tú     con ojos vendados 

un teléfono timbrando.

Tu profesión es dejar puertas y ventanas abiertas

para con viento orear casa.

Las corrientes no me gustan.

Y esos arbotantes que te cuelgan del cuerpo

son causa por la que soporto el frío.

Aunque me mires así       debo decirte:

eres esa luz que olvidé apagar por la noche.

Imagino un país  

bosque en el que pasear no es peligroso

donde mi cabello se encuentra con el viento.

país de colores         de juguetes y cubos

donde el vuelo de mi hermano siga estando en mi imaginación

no en los periódicos.

Soy un ángel mal parido que vino a la tierra

para arrebatar esa esperanza que tienen las niñas de casa

para enseñar que el príncipe azul si existe y lo tengo entre las piernas.

Mi hermana me pregunta


si algún día me voy a casar.


No me pregunta si creo en el amor


sabe que no podría preguntar eso.

                                                                                                                                Pablo Natale

                                                                                                                         

En el amor sí creo

lo que no me entra por la cabeza es el ser humano

todo lo inventa              vida de ficción

un devenir lúgubre que se llama matrimonio

un arrepentimiento

un dedo que te dice dónde no puedes entrar

boda con la mentira          cachetada con guante blanco.

Mientras pasa el efecto

te imagino desnuda con tu novio al lado  

cansado de tanto amor. 

Tú       con el sexo abierto  

te corres sin prisa 

y me imaginas imaginándote con tu novio al lado

pero yo no me corro

me estanco en este sofá que te piensa a toda hora.